Depresión, ¿enfermedad o cura?

Fuente de la Imagen: https://www.psicoactiva.com/blog/venganza/ Comenzaremos explicando qué es la venganza y por qué la sentimos. La venganza viene muy unida con la ira y la justicia y es una emoción primate y primaria que tenemos los seres humanos cuando algo o alguien nos traiciona y tenemos una sensación de que "se debe" hacer justicia o la realizada no es suficiente, por lo que ahí pasamos a planearla nosotros mismos, comenzando una venganza. El fin último de la venganza, sea psicológica o física, es infligir ese castigo y deseo de justicia a aquellos y aquellas que nos han traicionado, mentido, defraudado a nosotros o alguien al que amamos, con el fin de equilibrar la balanza y que el otro sienta exactamente lo mismo que nosotros hemos experimentado.  Como hemos indicado, es una emoción humana básica, su función si es sana y se sabe gestionar es guiar al ser humano a la actuación y a la acción ante cualquier obstáculo que tengamos pero normalmente esto rara vez pasa, y t

  Nazaret Castellano Olmo/ Graduada en Enfermería por la Universidad de Jaén En este blog, muchas veces hemos hablado de la sugestión, y del poder de la mente sobre nuestro interior ( y exterior), Véanse  etiquetas como " Mindfulness ", "empowerment", etc. Pero nunca le hemos dedicado una etiqueta específica a un tema tan apasionante a la vez que desconocido , que es la sugestión mental, que puede ser positiva o negativa. Un tema de diálogo que en muchas de nuestras conversaciones, la psicóloga Paula Sánchez Piazuelo  http://psicologiaconpaula.es/  y yo hemos tratado y hasta intercambiado opiniones.  Empecemos por lo más fundamental que es que la sugestión es un fenómenos psicológico que tiene la capacidad de reconducir ideas, pensamientos o incluso sensaciones físicas, tanto en nosotros mismos como en los demás ¡OJO¡ La hipnosis, por ejemplo, muy empleada por psicoanalistas y Freudianos, se ha considerado una forma clásica de sugestión, pero no es esa sugestión exa

Nazaret Castellano Olmo/ Graduada en Enfermería por la Universidad de Jaén Fuente de la imagen:  https://blog.rafaelsantandreu.es/que-hay-detras-de-la-ira/ La ira, además de considerado uno de los mas feos pecados en la mayoría de religiones monoteístas, como tal, es un sentimiento, y un sentimiento tan poderoso que incluso la interpretación que hacen de ella la religión islámica y cristiana es parecida, y muchas veces reflejada en el mismo Dios. Pero lejos de teologismos, la ira, cólera o furia, como se quiera llamar, es uno de los sentimientos más poderosos a los que nos vamos a tener que enfrentar, porque no es insidiosa, es explosiva. Su afluente más pequeño es el enfado, y el más grande la misma ansiedad personificada.  Cuando en entradas anteriores os hablaba de la inteligencia emocional (véanse etiquetas), os decía que el primer paso para revertir un sentimiento es identificándolo, pues bien, en el momento que os sintáis frustrados, resentidos, impacientes, irascibles y tengáis

Fuente de la imagen :  https://psiquiatria.com/psicologia/ansiedad-depresion-y-malestar-emocional-en-los-profesionales-sanitarios-de-las-unidades-de-cuidados-intensivos/ Hemos hablado muchas veces de la depresión y el malestar emocional en todas las personas las cuales son víctimas de esta pandemia, pero ahora nos encontramos en una pandemia biosanitaria, y las urgencias y las UCIs están saturadas y en su máxima capacidad de rendimiento, con sanitarios triplicando turnos, sin material, con una presión asistencial y psicológica increíble, por los pocos medios, el poco tiempo, y...pese a quien le pese, el poco apoyo de sus propios superiores que los recriminarán si tienen algún pequeño fallo para machacarlos y así incrementar su malestar emocional.  Yo os cuento, lo que va a pasar; además de que tenemos miles y miles de profesionales ahora mismo infectados (y por lo tanto de baja), cuando la pandemia acabe (que lo hará, aunque por los conocimientos que tengo de epidemiología, pongo la ma

Fuente de la imagen:  https://www.diariodehuelva.es/2020/03/18/psicologia-coronavirus/ No me voy a meter en qué es el coronavirus, cómo funciona ni nada respecto a ello porque no soy epidemióloga, pero de lo que sí se, es que para personas con trastornos afectivos, el confinamiento no es nada bueno, es más, el consejo médico más básico que se da a gente con depresión es "sal de casa".  Pero, y ¿qué podemos hacer cuándo no nos dejan?.  Para empezar debemos tener en cuenta que el cerebro humano ante una noticia impactante reacciona en una secuencia lógica, que permite la adaptación y supervivencia del individuo.  Primero, tira de recuerdos en la memoria lejana y reciente similares, para aludir a los comportamientos que nos sacaron del problema, pero en este caso, esto nunca había pasado, luego no hay un antecedente al que amarrarse, por consiguiente, el cerebro pasa por una series de fases. -Estado de incredulidad: No sabe que ha ocurrido y se encuentra en un limbo